EMBORRACHARSE CON EL TAMPON

Se conoce como 'tampón de alcohol', 'tampón vodka' o 'slimming' y es la última moda entre las adolescentes para emborracharse por la vía rápida. Al llegar a casa, nadie nota en tu aliento que has bebido. Esta práctica, que viene de Estados Unidos y que ya ha llegado a España, consiste en introducir un tampón empapado en vodka, whisky o cualquier otra bebida alcohólica por la vagina -o incluso por el ano en el caso de los chicos- de tal manera que el alcohol entra directamente a la sangre, consiguiendo llegar al estado de embriaguez de forma casi inmediata.

“Mojas el tampón directamente en whisky, porque es de lo que más grados tiene, y te lo colocas como un tampax. El alcohol va directamente a la sangre y es como si te tomaras 5 copas”, confiesa una joven ante las cámaras del programa ‘Espejo Público’ (Antena 3).

Los médicos advierten que esta práctica supone un serio riesgo para la salud, pues el alcohol administrado por esta vía puede dañar las paredes vaginales, provocando la intoxicación y hasta la muerte. “La vagina es un órgano que absorbe muy bien los medicamentos, con lo que se pretende conseguir los mismos efectos con menos dosis”, afirma el ginecólogo Iñaki Lete Lasa.

Otro de los problemas de este método, es que no podemos controlar los niveles de alcohol en sangre. “Cuando se bebe demasiado, se acaba vomitando, lo que supone expulsar una buena parte del alcohol ingerido. Pero cuando se hace por la vagina, no hay ese mecanismo de control por lo que es más fácil llegar al coma etílico”, afirma.

En Estados Unidos también se detectó otro extraño método para emborracharse extremadamente peligroso para el organismo que consiste en introducir el alchol por el ojo.

Lo primero que hay que entender es que la vagina mantiene un ambiente que, por lo general, es un estado de acidez, condiciones naturales para que los microorganismos que la habitan estén en perfecto balance; pero si por algún motivo éste sufre algún cambio, dicho nivel provoca que los microorganismos proliferen y se dé paso a una infección vaginal”, señala la especialista.

Agrega que si el tampón se deja por mucho tiempo dentro de la vagina, se crea el ambiente perfecto para que diferentes bacterias crezcan y generen enrojecimiento, inflamación y dolor, o desarrollar el Síndrome de Choque Tóxico, una infección que puede ocasionar la muerte.

Los doctores aseguran que con los tampones en las rocas no se evitan las multas en el alcoholímetro, debido a que el alcohol se procesa por las vías respiratorias, y aunque no haya aliento alcohólico, automáticamente se daría positivo en la prueba.

Es necesario que las autoridades y los padres de familia pongan atención en el asunto y estén alertas a los síntomas que manifiesten sus hijos.